Y si te pones a pensar, es posible que detrás de cada nube con forma de nave se oculte una civilización que viene a visitarnos, en medio del calor del medio día, en que todos sueñan con cervezas o limonadas, helados, ceviches de invierno, una en la que el amor no se haya desarrollado lo suficiente para sentir celos de unas miradas descuidadas o que no tenga mayor alegría que vernos corretear enlatados en cápsulas rodantes, queriendo escapar del sol. Y si te pones a pensar, de repente nada existe allá afuera y solo sufrimos de pareidolia de universos anteriores en los que íbamos a buscar nuevas civilizaciones en nuestras naves equipadas con camuflaje de nubes acolchadas, que recuerdan más a hilos agrupados de azúcar que a flotas invasoras. Y puede que sólo tengamos puro sentimiento de soledad, flotando en esta roca rumbo a la oscuridad mayor.
#Microdiálogos #Domingo
